Un año más, unos 30 pedregaleños que estaban en el pueblo para pasar la nochebuena, se juntaron en el bar para comer y compartir la deliciosa comida que cada uno aportó.
Tras una tarde de juegos en el bar, a las 19:00 se encendió la tradicional hoguera en la puerta de la Iglesia y de seguido, se recorrieron las casas del pueblo para pedir el aguinaldo, donde más de 10 niños iban cantando villancicos y recibiendo tan contentos unos dulces.
Fue una de las Nochebuenas con más participación de los últimos años, así que ojalá podamos seguir manteniendo estas tradiciones.